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Los nootrópicos, o como a muchas personas les gusta llamarlos, "píldoras inteligentes", son "potenciadores cognitivos" que pretenden mejorar la capacidad de aprendizaje, la motivación, la concentración y la creatividad. Pero, ¿funcionan los nootrópicos y realmente su uso es seguro?
En los últimos años ha habido un gran aumento en la popularidad de los nootrópicos, especialmente entre los estudiantes universitarios, los recién graduados e incluso los ejecutivos que trabajan arduamente. Los nootrópicos se consideran "drogas inteligentes" no adictivas, o como sustancias que ayudan al cerebro a funcionar de manera más eficiente. Entonces, ¿cuál es el mejor nootrópico del mercado hoy en día?
El término "nootrópicos" cubre una amplia gama de medicamentos, hierbas y suplementos que estimulan el cerebro y que se dice que tienen efectos de mejora cognitiva.
¿Qué son los nootrópicos?
Nootrópicos es otro nombre para "drogas inteligentes", "estimulantes del cerebro" o "drogas que mejoran la memoria". Existe una amplia variedad de productos disponibles en el mercado que están clasificados como nootrópicos, considerando que la definición exacta de un nootrópico aún está en debate, ya que el término no está estrictamente regulado.
Algunos ejemplos de nootrópicos incluyen:
Es difícil describir exactamente cómo funcionan los nootrópicos porque cada uno es único y tiene sus propios mecanismos de acción específicos.
Pero lo que la mayoría de las drogas inteligentes tienen en común es que son capaces de alterar los niveles de ciertos neurotransmisores, enzimas u hormonas en el cerebro, como acetilcolina, adrenalina, dopamina, serotonina y GABA. Muchos aumentan la energía (algunos a través de la cafeína), promueven el flujo sanguíneo y ayudan a proteger el cerebro del estrés oxidativo.
Los mejores nootrópicos
Entonces, ¿cuál es el nootrópico más eficaz? Los nootrópicos que se han estudiado más ampliamente y que se ha demostrado que ofrecen beneficios reales para la salud mental incluyen:
1. Hongos medicinales
Los hongos medicinales incluyen especies como reishi, cordyceps, melena de león, cola de pavo y chaga. Se ha demostrado en estudios que estos hongos ayudan a respaldar la función cognitiva de algunas de las siguientes maneras:
Lucha contra el deterioro cognitivo en adultos mayores
Poseen propiedades antioxidantes que protegen el cerebro
Actuán como adaptógenos que aumentan la resiliencia en momentos de estrés
Regulan los niveles de cortisol
Combaten la fatiga
Poseen propiedades anti-tumorales
Favorecen la función inmunológica
2. Hierbas adaptógenas
Los adaptógenos incluyen hierbas y hongos como ginseng, albahaca, ashwagandha, raíz de astrágalo, raíz de regaliz, rhodiola rosea y cordyceps. La albahaca es un adaptógeno que puede ser eficaz para mejorar la respuesta al estrés, reducir los niveles de cortisol en sangre (otra hormona del estrés) y crear alteraciones positivas en el sistema neurotransmisor del cerebro.
La rhodiola y el astrágalo pueden ayudar a quienes sufren de fatiga relacionada con el estrés y pueden mejorar la concentración y disminuir la respuesta del cortisol. La raíz de regaliz puede ayudar a aumentar la energía, la resistencia y fortalecer el sistema inmunológico, mientras que la ashwagandha puede prevenir úlceras gástricas relacionadas con el estrés, mala cognición y memoria, enfermedades neurodegenerativas, inflamación y desregulación de las glándulas suprarrenales causadas por niveles altos de cortisol.
3. Bacopa Monnieri
Esta hierba también conocida como Brahmi, se ha utilizado en la medicina ayurvédica tradicional. Se utiliza para ayudar a controlar una amplia gama de problemas de salud relacionados con el estado de ánimo y la salud mental, incluida la enfermedad de Alzheimer, la pérdida de memoria, la ansiedad, los síntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y más.
Se ha demostrado que la bacopa ayuda a regular la producción de dopamina y serotonina y también funciona como un calmante natural para el estrés. Los estudios sugieren que la bacopa no es adictiva, puede mejorar la memoria, reducir la ansiedad y la depresión y apoyar el enfoque, la atención, el aprendizaje y la memoria.
4. Aceite de pescado y omega 3
Los ácidos grasos omega-3 como DHA y EPA son componentes esenciales para un cerebro saludable y pueden ofrecer protección contra el daño a las células cerebrales. También pueden ayudar a mantener la memoria, concentración y reducir la inflamación. El omega-3 se puede encontrar en pescados como el salmón o las sardinas, frutos secos como las nueces, semillas de chía y semillas de linaza, y también se puede obtener en forma de suplementos.
5. Ginseng
El ginseng (o Panax ginseng) es un adaptógeno bien conocido por su efecto calmante y concentración en adultos jóvenes sanos. Los estudios sugieren que el ginseng posee importantes propiedades para combatir el estrés y puede utilizare para el tratamiento de ansiedad, falta de concentración, fatiga, etc. También tiene efectos antioxidantes, puede ofrecer neuroprotección y se ha encontrado que mejora estado de ánimo, rendimiento mental y niveles de glucosa en sangre.
6. Gingko Biloba
El ginkgo es una de las hierbas que se consumen con mayor frecuencia para la salud del cerebro. Ha sido ampliamente estudiado por sus efectos antiinflamatorios, antioxidantes, y estimulantes de la circulación. Los beneficios del ginkgo biloba incluyen una mejora función cognitiva, favorece un estado de ánimo positivo, aumento de la energía, mejora la memoria y una reducción de los síntomas relacionados con múltiples enfermedades crónicas, como el TDAH y la demencia.
Otras menciones seguras incluyen:
¿Por qué los nootrópicos son buenos para ti si quieres mejorar el rendimiento cognitivo y la salud mental?
Los beneficios asociados con los nootrópicos incluyen:
¿Cuáles son los mejores nootrópicos para mejorar la memoria, la velocidad del pensamiento y la atención? Algunas opciones incluyen: ginkgo biloba, extracto de café verde o té verde matcha. La cafeína y la L-teanina se encuentran en el té negro y pueden ayudar a mejorar la concentración y posiblemente el estado de ánimo.
¿Cuál es el mejor suplemento nootrópico para lidiar mejor con el estrés, estabilizar tu estado de ánimo y vencer la niebla mental? Prueba los adaptógenos y hongos medicinales, como chaga, cordyceps y reishi, además de rhodiola, ashwagandha y astrágalo.
Algunas recetas
Además de incorporar nootrópicos en tu rutina, considera cómo puede incluir más alimentos que estimulen el cerebro en tu dieta para mejorar naturalmente el enfoque y la memoria. Ejemplos de "superalimentos" densos en nutrientes que incluyen vitaminas, fitonutrientes y antioxidantes que pueden apoyar la función cognitiva incluyen:
Dónde encontrarlos y cómo utilizarlos:
Dependiendo del tipo de nootrópico que uses, deberás tener la opción de comprar fórmulas que están disponibles en varias formas, incluidas cápsulas, polvos, extractos, aceites, tés y jarabes. Si estás buscando los mejores y más seguros nootrópicos, busca un producto natural (como los derivados de plantas) en lugar de productos sintéticos que tienden a tener efectos más fuertes.
Compra aquellos que enumeren claramente todos los ingredientes en su etiqueta. Si utilizas un producto a base de hierbas, busca uno que sea orgánico o elaborado de forma silvestre para reducir la probabilidad de contaminación y OGM.
Todos los nootrópicos funcionan de manera diferente, así que siempre lee atentamente las instrucciones de dosificación. También presta atención a si debes consumirlo en ayunas o con alimentos, y si debes evitar tomarlo demasiado cerca de la hora de acostarte.
Un poco de historia
Los nootrópicos naturales como los hongos y los adaptógenos se han consumido durante miles de años. Pero a partir de la década de 1950, los científicos británicos y estadounidenses comenzaron a experimentar con sustancias que alteran la mente que podrían ayudar al personal militar y potencialmente combatir ciertas enfermedades. Uno de los primeros usos de los nootrópicos fue ayudar a la CIA. Las sustancias se combinaron con enfoques como la terapia de choque y la hipnosis, pero estos esfuerzos en su mayoría fracasaron y terminaron causando efectos dañinos.
Cuando el Dr. Corneliu Giurgea acuñó por primera vez el término "nootrópicos" en 1972. Investigó los nootrópicos con respecto a su capacidad para beneficiar la memoria y apoyar los procesos cognitivos, pero también quería asegurarse de que fueran seguros y no tóxicos. A Giurgea se le ocurrió la palabra nootrópicos combinando las palabras griegas para "mente" y "flexión".
Nutrióloga clínica, funcional e integral especialista en enfermedades autoinmunes. Entregada a un estilo de vida saludable, dinámico e intelectual. Activista del respeto y cuidado de los animales.